En la última década, tal vez el mayor cambio en Internet ha sido el aumento del contenido audiovisual. Tanto de material producido profesionalmente como de contenido creado por los propios usuarios a través de sus smartphones. Esta creciente tendencia nos permite asegurar que la tecnología seguirá impulsando este crecimiento, tanto en términos de accesibilidad al hardware y software como en el ancho de banda para subir y descargar contenido en video.
Según un reciente estudio de Cisco, en 2019 el 90% del tráfico en internet, será de contenido en video. Ha llegado el momento de apostar por el vídeo, pero ¿por qué?
1. Se crea una conexión emocional única
Mediante una pieza audiovisual (spot, branded content…), las marcas pueden transmitir sus valores a su público de una forma mucho más eficiente que otros medios. Es una oportunidad para conectar con el target reforzando su mensaje y fidelizando al usuario a largo plazo.
2. Reutilización o reciclaje del contenido
El vídeo ofrece posibilidades de reutilización que otros medios no pueden hacerlo. Teniendo una buena fuente de vídeo (entrevista, vídeo de ficción, etc…) las posibilidades de reutilización son infinitas. Se pueden extraer fotografías para promociones, escenas eliminadas, making of u otro material spin-off para fines de marketing. De vídeos más largos, se pueden generar micro-clips o cápsulas que pueden distribuirse fácilmente por las redes sociales y llegar a diferentes públicos.
3. El vídeo puede mejorar la marca y las acciones de marketing
Debido a que el vídeo es un medio mucho más convincente y completo, puede ser el eje central de las acciones de marketing. La integración de los sentidos visuales, auditivos y narrativos, ofrecen una sólida forma de comunicar. Los canales de difusión nos permiten analizar la eficacia del mensaje, los puntos de interés y desinterés.
4. La compartición y la capacidad de incrustación en diferentes plataformas
Hoy en día, compartir un vídeo en las redes sociales, es un hecho cada vez más cotidiano. Esto hace que las creaciones (si son buenas) lleguen más lejos y a más gente sin costes muy elevados. Para ello, y en el ámbito de la empresa, es imprescindible que los contenidos generados sean de alta calidad (narrativa y técnica) y que se acompañe de una acción inicial de difusión en redes sociales y conseguir que el contenido se mueva por sí solo.
5. El tiempo de fidelidad del usuario es más alto
La cantidad de ruido generado por millones de productores de vídeos, han creado un ecosistema desordenado. A veces encontrar buen contenido en plataformas como YouTube se convierte en una experiencia frustrante para el usuario. En el momento en que el usuario encuentra un buen generador de contenidos, se convierte en un fiel seguidor de su mensaje. Las marcas deben aprovechar esta oportunidad para lanzar su comunicación.