Estos son los diversos pasos que una productora audiovisual sigue para realizarlo, comenzando desde la etapa de la idea o concepto hasta tener el producto terminado.
Establece un objetivo para el video
Cada video corporativo debe lograr un objetivo claro, ya sea la introducción de un producto, la participación de los visitantes en un sitio web, la formación sobre un producto o servicio o animar a comprar. Una vez que se establece un objetivo, el equipo de producción debe asegurarse de revisar todo el proceso para no desviarse del objetivo.
Creando un concepto de video
Crear un video corporativo es como construir una casa: puede ser tan grande o tan pequeña según las necesidades de tu empresa. ¿Debería ser una simple entrevista con el fundador mientras se hace un recorrido por las instalaciones para mostrar quién es y qué hacen? ¿O sería más interesante ver el uso del producto en una situación real que requiera de actores, localizaciones, escenas elaboradas y accesorios? El concepto establecerá el escenario para determinar la cantidad de trabajo, el presupuesto y el tiempo necesarios para realizar un video corporativo.
Determina dónde se visualizará
¿Dónde se presentará el video corporativo? Ya sea que el video se publique en el sitio web, un stand de una feria, un canal de TV, en YouTube o en Facebook, esta decisión cambiará el enfoque del estilo y la producción de un video. ¿Sabías que el 85% de los videos de Facebook se miran SIN sonido? Los creativos de una productora audiovisual conocen diversas formas de comunicación para adaptarlo al medio con el fin de garantizar que los espectadores comprendan el mensaje sin audio.
Establecer una fecha límite
La mayoría de los vídeos tienen un deadline a cumplir. ¿Este vídeo se va a usar en una feria comercial? ¿para el lanzamiento de un producto? ¿O se necesita para el lanzamiento de un nuevo sitio web? Todos estos pueden impulsar un motivo para una fecha límite. La mayoría de las producciones de vídeo necesitan entre 4 y 8 semanas en realizarse.
Establece un presupuesto
Después de establecer algunos objetivos específicos, se deben cuantificar para valorar el retorno de la inversión. Si el video aumentará la participación en el sitio web, ¿que valor tiene? Si genera más ventas a una página de destino, ¿qué valor tienen esos resultados? Recuerda que también hay beneficios no tan medibles, como una mejor percepción de la marca, empatía con el cliente, mayor compromiso, etc.
Otros factores que debe tenerse en cuenta y que pueden afectar el presupuesto son:
Actores
¿El guión requiere actores o figurantes para producir el video, o solo requerirá algunos empleados o amigos?
Localizaciones
Al hacer un video, se requieren localizaciones y permisos especiales para contar la historia. ¿Deberían ser subcontratadas, o es posible producir el video en localizaciones existentes como las oficinas del cliente, la tienda o la casa de un empleado?
Accesorios
¿El video requiere accesorios o decoraciones adicionales a las que dispone la empresa? Si la empresa fabrica fundas de iPad, ¿tiene iPads disponibles para usarlas? Si el producto es una correa para perros, ¿se necesitarán algunos perros, un parque para pasearlos y comida para ellos para poder realizar una demostración adecuada del producto?
Días de rodaje
La forma más eficiente de producir un video corporativo es limitar la cantidad de días de rodaje. El trabajo del equipo de producción es pensar en cómo pueden falsear un solo lugar para que parezcan múltiples, o programar
localizaciones que estén lo suficientemente cerca para filmar en un solo día. Cada vez que se añade otro día de rodaje, el presupuesto aumentará con cada miembro del equipo (productor, director, cámara, eléctricos, sonido, peluquería y maquillaje, etc..)